sábado, 30 de octubre de 2010

Al encuentro

Se poco de tu presente y menos aun de tu pasado. Se que sufrís, lo veo en tus ojos. Se que palidece tu corazón. Solo unas horas por semanas nos encuentran y sin embargo puedo ver detrás de tus ojos. Puedo ver un cuerpo que quiere salir de si y no sabe como, un cuerpo inquieto que grita, que pide ayuda, y una boca incapaz de expresarlo. Puedo ver que estas dolido, que necesitas algo por descubrir.

Puedo ofrecerte una oreja, una charla y un abrazo.

Y el deseo que todo se solucione.

No hay comentarios:

Publicar un comentario